domingo, junio 26

     La adolescencia me ha enseñado que, si bien todos somos distintos, ninguno es tan único como creemos; siempre habrá alguien a quién le pase más o menos lo mismo que a nosotros. Lo cual significa que siempre tendremos a alguien con quien contar, alguien que nos ayude, o al menos compartir los problemas.
     Es verdad, nunca estamos completamente solos.


1 comentario: